Género: Microhouse, Minimal Techno, Ambient.
Black Noise, no tengo claro si llega a la altura de su predecesor, las percepciones son muy subjetivas e influenciadas por estados de ánimo y apetencias de momento, por tanto dejaré de lado las comparaciones. Y menos aún cuando se trata de una electrónica tan repleta de matices, extensa, y variada. Sumergirse ante tales parajes no es tarea sencilla, y la descompresión requiere de muchas horas para poder asimilar formatos y sonidos que no son de gancho directo. Podría deambular por los bypass que enlazan loops con silencios, las delicadas percusiones protagonizadas por xilófonos, por esas burbujas que transitan desde los tímpanos hasta nuestro cortex… demasiado complejo, lo más sencillo es adentrarse, preferiblemente con los auriculares bien encajados, sin prisas, sin prestar apenas atención, sin esperar que la calma necesariamente tenga que convertirse en tempestad. Quizás así nos daremos cuenta que estamos ante un trabajo elegante, sensual, orgánico, donde la naturaleza y la máquina se dan la mano, donde la lluvia ilumina al sol y es el sol quien nos moja. Eres tú, y solo tú quien tiene que descifrar los mensajes ocultos tras los bits.
Dejo la canción que abre el disco, Lay in a Shimmer: