Género: Symphonic progressive rock, indie rock, space rock, psychedelic.
17 Pygmies banda de los Los Ángeles formada en 1983 que actualmente está compuesta por Jackson Del Rey (Vocals, Bass, Guitar, Synthesizer), Meg Maryatt (Vocals, Electric Guitar, Accordion, Synthesizer, Classical Guitar), Jeff Brenneman (Guitar, keyboard) y Dirk Doucette (Drums, Percussion, keyboard).
Son casi treinta años desde su creación pero un largo paréntesis separa Missyfish allá por 1991 del extraño proyecto Celestina que arrancó hace cuatro años, basado en la clásica novela del siglo XV de Fernando Rojas. Concebido como salmos dictados a través de un paisaje musical progresivo y surrealista entre el amor y el engaño, dicho proyecto se dividió en tres partes: Celestina (2008), CII: Second Son (2011) y CIII: Even Celestina Gets The Blues (2012) el disco que os presentó hoy, puesto en circulación el 2 de enero.
Disco de digestión lenta y paciente, de mecánica ondulatoria, transforma la tragicomedia de Calisto y Melibea en un paradigma que sólo saben descifrar los diecisiete pigmeos, una historia de amor que arranca en un agujero negro donde adentrarse y no saber donde ni cuando salir de él. Experimental viaje al pasado desde un futuro digital, radiactivo y etéreo, únicamente apto para funambulistas sin red protectora. Si David Lynch dirigiese una película de ciencia ficción le recomendaría este disco. Y puestos a dejar de lado tanta subjetividad, pero sin abandonar la estirada neuronal que le doy al asunto, aunque situando de forma más práctica la reseña, es como si Pink Floyd se aliasen con el amor, pero también con Mercury Rev o Sparklehorse para invadir el reinado de los Reyes Católicos.
De las 32 partes de esta trilogía, dejo la 25.
Si te quedan fuerzas después de la verborrea, feliz viaje.
